Una terapia familiar sistémica que nos permite abordar asuntos muy humanos, con una gran cercanía con los compañeros. El amor, la muerte, los padres, la culpa, la salud.. Después de un taller solemos percibir como los temas que nos afligen son comunes y cuanto tenemos en común con ese que parece tan diferente.

A un taller se puede ir a participar mirando y acompañado el trabajo de los compañeros, o con la intención de hacer una constelación personal. El grupo da la oportunidad de trabajar no solo en nuestro caso singular, cada constelación nos amplia la mirada y genera movimientos en el alma del grupo que coincidió en ese momento.

El taller esta abierto para todo aquel que sienta el llamado sin necesidad de experiencia previa.